La historia de Lagranja Collection empieza en 2012 con el diseño de una butaca para el hotel Chic&Basic Ramblas de Barcelona. Como el presupuesto para el interiorismo del hotel era ajustado y no queríamos usar réplicas decidimos aventuramos a diseñar y producir una serie de 15 butacas. Al fin y al cabo, siempre hemos pensado que cuando no se encuentra lo que se busca, lo mejor es hacerlo uno mismo.
El diseño de la butaca debía ser bonito, sencillo, fácil de producir y sobretodo debía ser suficientemente original para que nuestra apuesta por la autoproducción tuviera sentido.
Y resulta que… ¡la cosa salió genial! Fueron muchos los huéspedes del hotel que preguntaron en recepción donde podían comprar una butaca como aquella. Así que nos pusimos manos a la obra y lanzamos una segunda serie. La butaca empezó a circular a través de las redes y de vez en cuando vendíamos unidades sueltas. Hasta que un día una cadena de cafeterías internacional muy importante nos encargó casi un centenar de unidades para unos cuantos de sus locales en Noruega. Tenía bastante sentido porque, al fin y al cabo nuestro diseño tiene un cierto acento nórdico. No podíamos estar más satisfechos, pero desde un punto de vista logístico la cosa empezaba a complicarse: gestionábamos pedidos, stocks, servicios postventa. ¡Nosotros!, que éramos y queríamos seguir siendo diseñadores…
Y fue entonces cuando la suerte volvió a llamar a la puerta en el momento más apropiado. Vergés, un productor de sillas local con tres generaciones de experiencia, nos contactó. Poco tiempo después se hacía cargo de la producción y la logística de nuestras butacas para que nosotros pudiéramos centrarnos en la parte creativa. Un año después de asociarnos con Vergés, la butaca ya no está sola. Hemos creado toda una colección basada en el mismo concepto que incluye sillas, sillones, taburetes y mesas. Todo a la venta a través de internet y al mejor precio posible.
“Basic”, el nombre de nuestra primera colección, viene a resumir un ideal que queremos que nos sirva de guía y que nos identifique en este nuevo proyecto. Los materiales de calidad, la fabricación cuidadosa y el buen diseño no tienen porqué tener precios prohibitivos. El buen diseño es básico. Y al revés: lo básico muy a menudo es sinónimo de buen diseño.